Todo esto sonaba increíble...
Pero una repentina ola de escepticismo comenzó a invadirme.
Hola, mi nombre es Denis Balitskiy y soy el fundador de Revolución Salud.
Mi misión es transformar el bienestar de los más de 200.000 seguidores que reciben mis consejos de forma diaria.
Para eso estoy en una constante búsqueda de nuevas técnicas e investigaciones que me ayuden a lograrlo.
Cuando me topé con toda la evidencia sobre la densidad nutricional de los alimentos, quedé muy impresionado con los resultados.
Pero por más emocionante que pueda parecer...
Por más que todas esas personas hayan perdido tanto peso sin recuperarlo...
Y por más que esto sea avalado por las Universidades más respetadas a nivel mundial...
Todavía me preguntaba si estos resultados iban a funcionar en absolutamente cualquier situación.
Así que inmediatamente me puse en mi rol de investigador que lo cuestiona TODO.
Me pasé meses cotejando estudios sobre la relación entre nutrientes y calorías...
Y las desastrosas consecuencias que suceden dentro de tu cuerpo cuando dejas de respetar esta relación.
Pero muy pronto descubrí que por más desesperante que creas que sea tu caso...
Hay una verdad universal acerca de todos los seres humanos:
Seguimos conservando nuestra sorprendente capacidad de adaptación metabólica.
Tan solo debes saber cómo activarla...
Esto fue lo primero que descubrí:
Puedes revertir décadas de daño metabólico aunque tengas los "genes rotos".
Si has estado acumulando testarudas grasas durante años...
O incluso si tus padres y abuelos han estado sufriendo del mismo problema...
Te encantará saber lo siguiente:
Un reciente estudio de la Universidad de Groningen, en los Países Bajos encontró que:
"Una mayor ingesta de alimentos de alta densidad de nutrientes puede ayudar a romper el ciclo intergeneracional de malnutrición y obesidad". (7)
Este estudio tomó en cuenta generaciones enteras de personas con problemas de obesidad, diabetes, osteoporosis y enfermedad del corazón...
Personas condenadas al inminente aumento de peso... y mortales enfermedades de por vida.
En otras palabras, personas cuyos genes habían sido "rotos".
Sin embargo, los investigadores concluyeron que estos problemas podían ser revertidos consumiendo una serie específica de alimentos de alta densidad nutricional.
Es por eso que si has estado buscando encoger tu vientre y revelar ese cuerpo sexy que no has visto en años...
Ya sea que luchas con la molesta grasa alrededor de tu cuello o barbilla...
Si quieres tener los brazos definidos, o unas piernas más delgadas...
O si simplemente quieres darle un merecido descanso a tus articulaciones que han estado soportando kilos extra por décadas...
Tú puedes lograrlo a pesar de tener una genética destrozada por generaciones.
Pero la historia no termina allí:
Casi me caigo de la silla al enterarme de este experimento de la Universidad de Pennsylvania.
La idea del experimento consistía en saber cuántas calorías puede ahorrase de comer una persona...
Pero sin sacrificar un solo gramo de alimentos que lleva a su boca... (8)
Los científicos ya sabían que cuando comes más nutrientes esenciales... pero menos calorías...
Mejor flexibilidad metabólica tienes...
Y más grasa quemas.
Así que le dieron a un grupo de participantes diferentes tipos de platos altos en calorías, alternados por platos ricos en nutrientes.
Tras solo 3 días de observación, los científicos habían notado algo que los dejó boquiabiertos:
Los participantes que habían estado comiendo una serie específica de alimentos nutricionalmente ricos...
Se ahorraban un promedio de 424 calorías por cada comida.
¡Esas eran más de 1200 calorías ahorradas por día!
Una vez más, el efecto era inmediato.
La flexibilidad metabólica de los participantes del estudio se estaba recuperando frente a los ojos de los investigadores...
Y una vez más, los participantes nunca se sintieron hambrientos o ansiosos...
Pero lo más sorprendente fue que absolutamente ninguno sacrificó la cantidad de alimentos en su mesa.
Todos seguían comiendo hasta sentirse completamente satisfechos.
Lo cuál significa que:
Mientras que otros se torturan con dietas inútiles...
tú puedes activar tu interruptor quema-grasa con el primer bocado de alimentos...
Los investigadores de la Universidad de John Hopkins querían confirmar si esto funcionaría en todo tipo de personas... (9)
Así que tuvieron en cuenta 23 estudios que habían respetado esta relación entre calorías y nutrientes.
Decidieron que incluirían a todo tipo de personas:
Desde niños en pleno crecimiento...
Hombres y mujeres en sus 30s, 40s y 60s...
Hasta personas que habían alcanzado una avanzada edad...
En todos los casos, los resultados fueron exactamente los mismos.
Independientemente de su edad, grado de sobrepeso o su condición física...
Todos los participantes terminaron perdiendo más peso y obtuvieron una menor circunferencia de cintura.
Los resultados eran alentadores... y el eco en diferentes comunidades científicas del Globo no tardó en llegar.
Pero los científicos alemanes de la Universidad de Potsdam estaban escépticos...
Así que decidieron hacer un meta-análisis independiente que involucró a más de 3628 personas.
Su conclusión fue como un puñetazo en el estómago a las grandes corporaciones farmacéuticas y de pérdida de peso:
Este estudio agrega evidencia que respalda la densidad energética de los alimentos como una medida simple pero efectiva para controlar el peso en los obesos. (10)
Por si fuera poco...
Los investigadores concluyeron que las personas perdían una libra de grasa cada vez que comían estos mismos alimentos...
Y así, la tormenta de noticias parecía no tener fin:
Estudio tras estudio, los participantes perdían peso con solo activar su interruptor quema grasa natural...
Un grupo de investigadores independientes publicaron sus observaciones en la revista médica de la Academia de Nutrición y Dietética:
Los científicos habían presenciado cómo 44 personas derretían un promedio de 14 kilos de testarudas grasas en cuestión de pocas semanas... (11)
Los científicos de la Universidad de Pennsylvania, respondieron con otro informe... (12)
En su estudio, un grupo de obesos hipertensos logró normalizar su presión y deshacerse de kilos de grasa.
Otro estudio conducido en Boston, EEUU, encontró que la quema de grasa era hasta un 340% superior con los alimentos de alta densidad nutricional... (13)
Pero probablemente nunca hayas escuchado al respecto.
Las noticias jamás llegaron a los grandes medios de comunicación.
A fin de cuentas, estas investigaciones independientes nunca contaron con el presupuesto multi-billonario de las empresas alimenticias...
Pero por más que las grandes farmacéuticas se esfuercen para venderte la siguiente píldora o dieta de moda...
Esta sencilla estrategia alimenticia ya fue relacionada con:
- Una drástica disminución de colesterol y riesgo cardiovascular (según Universidad de Tufts). (14)
- Una mejora inmediata de tu memoria y respuestas cognitivas (según Universidad de California). (15)
- Un metabolismo mucho más rápido (según Universidad McGill). (16)
- Mayor rendimiento físico y recuperación muscular (según Universidad de Washington). (17)
- Menores picos de insulina (según Universidades de Coventry and Warwickshire). (18)
- Menos inflamación y mejores tasas de recuperación (según el Mar Medical Research Institute). (19)
Cada nuevo resultado volvía a demostrar esta simple verdad...
A más nutrientes y menos calorías, tu cuerpo rejuvenece desde adentro y hacia fuera...
Tu flexibilidad metabólica vuelve a prosperar...
Y puedes volver a disfrutar de las prendas de hace décadas atrás...
Los científicos holandeses de la Universidad de Maastricht no pararon de advertir este efecto durante años de investigación.. (20)
Todos los años, los participantes del estudio reducían centímetros de cintura...
Algunos de ellos se quejaban de que las prendas anteriores les quedaban como si fuesen carpas de circo...
Y todos los años se veían obligados a salir de compras para renovar sus guardarropas.
Sin embargo, aunque mi corazón se aceleraba con cada nueva pieza de evidencia que demostraba el increíble poder de esta estrategia…
Todavía tenía serias preguntas respecto a cómo aplicar este principio nutricional a la vida real.
Me preguntaba qué iría a pasar con aquellas personas que han estado recortando calorías durante toda su vida...
Personas comunes con vidas ajetreadas y llenas de ocupaciones...
Que no tienen el tiempo ni el presupuesto de una celebridad de televisión...
Personas que sufren de constantes antojos y se ven obligados a alimentarse con comida de paso...
Y que nunca podrán hacerse con alimentos exóticos o suplementos especiales...
Hasta que me topé con la nueva investigación de la Universidad de San Diego.
Todos los participantes de este estudio reportaron que habían dejado de sufrir hambre.
Sucedió ni bien comenzaron a consumir una serie específica de alimentos de alta densidad nutricional. (21)
Su ansiedad fue medida de acuerdo a síntomas físicos y emocionales.
Pero el resultado siempre fue el mismo.
Nada de hambre y menos estrés.
Por más que algunos participantes habían salteado comidas debido a su estilo de vida ajetreado....
Y por más que no tenían tiempo de seguir las complicadas reglas de las dietas...
El efecto volvía a ser inmediato.
Su potencial quema grasa quedaba restaurado con la primer comida que respetaba la relación entre calorías y nutrientes.
Pero lo más importante fue esto:
Los alimentos que consumieron los participantes eran los típicos comestibles del supermercado...
Solo que habían combinado estos alimentos de una manera específica y en los horarios justos.
Sin embargo, todavía faltaba descubrir lo mejor:
Imagínate mi sorpresa cuando descubrí que:
Los Resultados Llegaban en menos De 24 Horas.
Todo comenzó cuando los investigadores de la Universidad de Vanderbilt habían notado que muchos adultos descuidaban esta relación entre calorías y nutrientes. (22)
Muchos de estos adultos luchaban con años de imparable aumento de peso y dolorosas enfermedades...
Otros padecían de hinchazón, intestinos inflamados y constante fatiga...
Así que los científicos decidieron comprobar si podían ayudarles a revertir este desbalance entre calorías y nutrientes...
Y se fijaron la loca meta de lograrlo en tan solo 24 horas.
Tras ofrecerles una sencilla combinación de alimentos de alta densidad nutricional...
¡Los investigadores pudieron observar que los resultados llegaban con la primera comida!
Otro grupo de científicos de la Universidad de Pennsylvania decidieron comprobar este mismo efecto. (23)
Una vez más, las mediciones fueron realizadas cada 24 horas.
Imagínate su sorpresa cuando, tras solo algunos días de observación, los participantes del estudio obtuvieron un promedio de pérdida de peso de 5,9 kilos.
Los resultados estaban a la vista:
Día tras día, los participantes acumulaban kilos de peso perdido al activar su interruptor quema-grasa natural...
Su flexibilidad metabólica marchaba a toda máquina...
Solo que ninguno había pasado hambre o seguido una dieta restrictiva.
Tras enterarme de estos resultados, me sorprendió lo rápidas y fáciles que se volvían las cosas con esta simple estrategia...
Cientos de personas ya habían podido deshacerse de esas fastidiosas grasas...
Sus amigos y familiares se sentían tan orgullosos...
Y los participantes de cada estudio estaban felices con su renovada silueta...
Pero Todavía Había Un Último Detalle Que Podría Echarlo Todo Por La Borda.
El Santo Grial de la pérdida de peso es que puedas mantener el cuerpo delgado por años...
Cosa que es imposible de lograr con ningún tipo de dieta.
Así que tenía que saber si la relación entre calorías y nutrientes garantizaría una permanente quema de grasa.
Me pasé meses investigando todo al respecto...
Hasta que un estudio muy particular me llamó la atención.
Se trataba de un riguroso ensayo médico controlado y aleatorio de la Universidad de Tennessee. (24)
En este ensayo, los investigadores habían comparado varios grupos de personas.
Uno de los grupos eran obesos que deseaban quemar grasa...
Y otro de los grupos estaba formado por aquellos que habían logrado perder peso...
Los investigadores querían saber qué rol habían cumplido los alimentos en la vida de esas personas...
Pero decidieron hacerlo de una manera que no dejara lugar a dudas:
Se comprometieron a comparar las diferencias de alimentación de estas personas por AÑOS...
Y hacerlo siguiendo un implacable método científico.
Así tendrían una prueba irrefutable de lo que realmente funciona a la hora de quemar grasa y mantener el peso perdido por siempre.
Tras más de 5 años de riguroso seguimiento, los resultados fueron contundentes:
Había una única diferencia entre el grupo de los obesos y los que habían logrado mantener el peso por años...
¡Eran los alimentos de alta densidad nutricional!